Chantal Maillard, presentó su obra poética en una conferencia bajo el título: "La baba del caracol" acompañada por Mª Pérez López, poeta y profesora de la USAL y por la también escritora y poeta Charo Ruano.
Chantal Maillard es filósofa y poeta española de origen belga. Es doctora en filosofía, ha vivido largas temporadas en Benarés, India, en cuya universidad se especializó en Filosofía y Religión India.
Es autora de numerosos ensayos, cuadernos y poemarios. Ha traducido y editado a Henri Michaux y colaborado en la difusión del pensamiento de La India.
Con su obra: "Matar a Platón” le fue concedido el Premio Nacional de Poesía (2004) y con "Hilos" recibió el Premio Andalucía de la Crítica y el Premio de la Crítica de poesía Castellana (2007).
Producción poética:Azul en re menor.1982, Semillas para un cuerpo, La otra orilla, Hainuwele, Poemas a mi mente, Conjuros, Matar a Platón, Hilos, La tierra prometida, Polvo de avispas, Balbuceos y La baba del caracol.
Su obra se nutre del pensamiento oriental.
La experiencia del dolor le viene a la autora de antiguo.
Fue feliz hasta los siete años pero a partir de ahí, los continuos cambios de internado en Bélgica y después la adaptación a España, donde se trasladó con su familia en pleno franquismo, la convirtieron en una niña desubicada y silenciosa.
Nació con el don de la escritura, en la palabra encontró cobijo, y a los catorce años ya había escrito dos novelas y más de cien poemas.
Con "Matar a Platón" obtuvo en 2004 el premio Nacional de poesía. El libro es seco y despojado, fue escrito durante su grave enfermedad, en el que la muerte y el dolor sin concesiones literarias, palpitan en cada una de sus páginas.
Su nuevo poemario, "Hilos" posterior a la imprevisible muerte de su hijo, revela a una de las voces poéticas más intensas, honestas y radicales del panorama actual.
Según Mª Ángeles Pérez López, la autora encontró su fuerza en la escritura, todo en ella es verdad, aunque esa verdad nos destroce.
"Semillas para un cuerpo" es un libro que tiene su anclaje en lo corporal, en lo orgánico. Se muestra en él un brutal cansancio de vivir, esfuerzo por sobrevivir. Dirá Maillard: "Deseé alguna vez que un poema me amase".
La poesía para ella es, una manera de estar en el mundo. Escritura poética como quien se sabe en el mundo. Llegar al otro, a lo otro. El lenguaje está plagado de conceptos y yo los cuestiono.
Poesía y filosofía dialogan constantemente ¿qué es la poesía? La poesía es un tipo de arte.
Esta pregunta nos tiene que hacer temblar a los que nos dedicamos a ello. Cuestiona la poeta si alguien pregunta ¿qué es el pan?, es algo obvio.
¿Cuál es la función de la poesía, qué se espera de ella? El poema descubre la realidad, el poema construye la realidad, teniendo en cuenta que la realidad es algo que sucede, ni se destruye ni se construye, con lo cual sólo tiene que señalar.
La realidad está dada solo hay que revelarla, es algo que hay que construir. Pone Chantal el ejemplo de tres animales para explicar el misterio poético.
El erizo pequeño que al ser arrojado a una autopista se hace ovillo cuando ve venir la muerte. Si lo queremos proteger, no se deja.
Llamo poema a aquello mismo que inventa el corazón. Un corazón allí que late, fuera de nuestra presencia, en la autopista.
Chantal Maillard nos dice que ella nunca firma un poema, porque considera que el poema lo firma el otro.
En La India el poeta es un mediador, lo que verdaderamente interesa es el poema. El poema descubre, revela.
Otro animal: El cangrejo ermitaño. En realidad la concha en la que se retrae, no le pertenece, porque es la concha de un animal muerto. No puede vivir sin una concha, cuando la que ha adoptado le queda pequeña la abandona.
El poema habita el lenguaje, se sirve de palabras muertas. La palabra es símbolo. El poema utiliza las palabras como el cangrejo las conchas. Lo que vemos del poema es igual que la concha del cangrejo.
La araña tejedora: La araña teje para un fin. Segrega y reabsorbe.
Hay que alejarse de la retórica, del aparentar. Ni el ave fénix ni el águila solo el erizo allá abajo, (erizo poemático). Yo prefiero el caracol.
La poeta está en contra de la industria del libro, debemos darnos cuenta de la necesidad de la humildad.
El poema, la escritura poética es lo que más debe tocarnos el corazón, hay que reaprender la humildad del inicio.
El caracol, deja trazas de luz sobre la piel, vías accesos para el acontecer, crece al mismo ritmo que su concha. La construye y se refugia en ella sellando el orificio para preservarse hasta que las condiciones sean las adecuadas.
El caracol es el otro que respira bajo las hojas de acanto. Un pulmón enorme para un ser diminuto. La respiración es la del otro.
Más pequeño que el erizo, sin pretensiones pasa sin defenderse, transita y en la mano apenas percibimos una pequeña humedad que luego cristaliza.
El acto de presentación de su obra, estuvo cargado de magia, logró Chantal Maillard cautivar al público que estaba en la sala. Tiene la poeta un poder de convicción enorme, la poesía,se convierte en palabras que llegan directamente al alma de quien escucha, en una atmósfera casi sagrada.
Es, creo yo, además de una poeta sobresaliente, una recitadora estupenda de sus poemas, con su voz, nos envolvió y nos llevó por esos mundos de ensueños que transita la poesía.
Gracias y espero que la poesía te lleve a encontrar la felicidad que anhelas. Estoy segura de que sí.
Como vemos en la foto, Chantal Maillard estuvo acompañada por Antonio Colinas, Asunción Escribano y otros poetas entre el público, que la arroparon en su presentación en Salamanca.
Chantal Maillard es filósofa y poeta española de origen belga. Es doctora en filosofía, ha vivido largas temporadas en Benarés, India, en cuya universidad se especializó en Filosofía y Religión India.
Es autora de numerosos ensayos, cuadernos y poemarios. Ha traducido y editado a Henri Michaux y colaborado en la difusión del pensamiento de La India.
Con su obra: "Matar a Platón” le fue concedido el Premio Nacional de Poesía (2004) y con "Hilos" recibió el Premio Andalucía de la Crítica y el Premio de la Crítica de poesía Castellana (2007).
Producción poética:Azul en re menor.1982, Semillas para un cuerpo, La otra orilla, Hainuwele, Poemas a mi mente, Conjuros, Matar a Platón, Hilos, La tierra prometida, Polvo de avispas, Balbuceos y La baba del caracol.
Su obra se nutre del pensamiento oriental.
La experiencia del dolor le viene a la autora de antiguo.
Fue feliz hasta los siete años pero a partir de ahí, los continuos cambios de internado en Bélgica y después la adaptación a España, donde se trasladó con su familia en pleno franquismo, la convirtieron en una niña desubicada y silenciosa.
Nació con el don de la escritura, en la palabra encontró cobijo, y a los catorce años ya había escrito dos novelas y más de cien poemas.
Con "Matar a Platón" obtuvo en 2004 el premio Nacional de poesía. El libro es seco y despojado, fue escrito durante su grave enfermedad, en el que la muerte y el dolor sin concesiones literarias, palpitan en cada una de sus páginas.
Su nuevo poemario, "Hilos" posterior a la imprevisible muerte de su hijo, revela a una de las voces poéticas más intensas, honestas y radicales del panorama actual.
Según Mª Ángeles Pérez López, la autora encontró su fuerza en la escritura, todo en ella es verdad, aunque esa verdad nos destroce.
"Semillas para un cuerpo" es un libro que tiene su anclaje en lo corporal, en lo orgánico. Se muestra en él un brutal cansancio de vivir, esfuerzo por sobrevivir. Dirá Maillard: "Deseé alguna vez que un poema me amase".
La poesía para ella es, una manera de estar en el mundo. Escritura poética como quien se sabe en el mundo. Llegar al otro, a lo otro. El lenguaje está plagado de conceptos y yo los cuestiono.
Poesía y filosofía dialogan constantemente ¿qué es la poesía? La poesía es un tipo de arte.
Esta pregunta nos tiene que hacer temblar a los que nos dedicamos a ello. Cuestiona la poeta si alguien pregunta ¿qué es el pan?, es algo obvio.
¿Cuál es la función de la poesía, qué se espera de ella? El poema descubre la realidad, el poema construye la realidad, teniendo en cuenta que la realidad es algo que sucede, ni se destruye ni se construye, con lo cual sólo tiene que señalar.
La realidad está dada solo hay que revelarla, es algo que hay que construir. Pone Chantal el ejemplo de tres animales para explicar el misterio poético.
El erizo pequeño que al ser arrojado a una autopista se hace ovillo cuando ve venir la muerte. Si lo queremos proteger, no se deja.
Llamo poema a aquello mismo que inventa el corazón. Un corazón allí que late, fuera de nuestra presencia, en la autopista.
Chantal Maillard nos dice que ella nunca firma un poema, porque considera que el poema lo firma el otro.
En La India el poeta es un mediador, lo que verdaderamente interesa es el poema. El poema descubre, revela.
Otro animal: El cangrejo ermitaño. En realidad la concha en la que se retrae, no le pertenece, porque es la concha de un animal muerto. No puede vivir sin una concha, cuando la que ha adoptado le queda pequeña la abandona.
El poema habita el lenguaje, se sirve de palabras muertas. La palabra es símbolo. El poema utiliza las palabras como el cangrejo las conchas. Lo que vemos del poema es igual que la concha del cangrejo.
La araña tejedora: La araña teje para un fin. Segrega y reabsorbe.
Hay que alejarse de la retórica, del aparentar. Ni el ave fénix ni el águila solo el erizo allá abajo, (erizo poemático). Yo prefiero el caracol.
La poeta está en contra de la industria del libro, debemos darnos cuenta de la necesidad de la humildad.
El poema, la escritura poética es lo que más debe tocarnos el corazón, hay que reaprender la humildad del inicio.
El caracol, deja trazas de luz sobre la piel, vías accesos para el acontecer, crece al mismo ritmo que su concha. La construye y se refugia en ella sellando el orificio para preservarse hasta que las condiciones sean las adecuadas.
El caracol es el otro que respira bajo las hojas de acanto. Un pulmón enorme para un ser diminuto. La respiración es la del otro.
Más pequeño que el erizo, sin pretensiones pasa sin defenderse, transita y en la mano apenas percibimos una pequeña humedad que luego cristaliza.
El acto de presentación de su obra, estuvo cargado de magia, logró Chantal Maillard cautivar al público que estaba en la sala. Tiene la poeta un poder de convicción enorme, la poesía,se convierte en palabras que llegan directamente al alma de quien escucha, en una atmósfera casi sagrada.
Es, creo yo, además de una poeta sobresaliente, una recitadora estupenda de sus poemas, con su voz, nos envolvió y nos llevó por esos mundos de ensueños que transita la poesía.
Gracias y espero que la poesía te lleve a encontrar la felicidad que anhelas. Estoy segura de que sí.
Como vemos en la foto, Chantal Maillard estuvo acompañada por Antonio Colinas, Asunción Escribano y otros poetas entre el público, que la arroparon en su presentación en Salamanca.